Desconocida

Todo empezó cuando el espejo me reflejó en la oscuridad como un cuerpo en vano ...

Me desconocí por un momento y no hice mas que indagar sobre esa mujer que estaba en ese oscuro y silencioso espacio, ya deben ser las diez de la noche y no se escucha nada ni a nadie, pero en mi cabeza habia una voz que no paraba de susurar mis defectos y lo miserable que se sentia ese cuerpo parado frente a aquel espejo, fingiendo tener carácter y ser fuerte cuando en las noches no para de llorar. Sabia que esto saldria a flote algún día pero esperaba que la vida fuera justa y me demostrara lo que piensa de mi de una forma diferente.

Despúes de que esa voz se fue de mi cabeza, me acoste a pensar en que habia echo que yo me convirtiera en esta clase de persona que siempre deteste, no se si es karma o coincidencia, pero me detesto. Ahora que lo pienso, siempre me he mentido creyendo que soy una persona ejemplar, pero algo en mi supone que todos nos mentimos de la misma manera. Cerré mis ojos para intentar dormir, pero cada vez que lo hacia me transportaba a un lugar negro, vacio y deprimente, En ese momento creí que mi castigono se habia acabado y que lo peor acababa de iniciar, pero este amargo trago no iba por cuenta de la vida, sino de ese cuerpo que aún recreaba el momento en el que estaba parado en el espejo. Me pregunte cual seria mi paradero si seguia así, y lo primero que pensé fue en la muerte, pues asi es como terminan todos aquellos que no son francos consigo en vida. Pasado esto, cerré los ojos con tanta fuerza como fue posible, con la intención de no ver ni soñar nada, pensé que ya todo habia acabado, pero en ese instante recibí un mensaje diciendo todo lo que falto por decir ... no sentia nada mas que los latidos de mi corazón y mi profunda respiración, era algo neutro, pues sabia que me lo merecia asi que decidí no reaccionar.

Los minutos siguientes a esto pasaron como días, pues logre entender tanto ese mensaje y todo lo que contenia que algo muy dentro de mi cambio. Desde este presiso momento, la Valeria del espejo no existe ¿y la que quedó? Esa es felíz.