11 de octubre de 2013

Frágil

Tu alma es de quien la compre si decides venderla, tus sentimientos de quien los recoja si los has botado. Tu vida del que la reciba cuando sin querer la ofrezcas, eres del mundo, así estés sólo.

Soy de mis nudos cuando sin querer no digo algo y de mi mente cuando no puedo, soy del insomnio que carcome mi juventud y del insolente frío acogedor que me mantiene despierta.

Soy de tu voz que me acompaña por las noches y de las palabras que arrullan cual susurro enamorado. Soy del aire que respiro que pudo ser tuyo entre afanes y de la certeza que te adorna cuando hablas de verdades.

Soy de los halagos sinsentido y de los te amo que quebrantan, de la sinceridad que odiándome sale a flote con orgullo y muy altiva a provocar un desastre monumental de emociones.

Soy tuya si me quieres y mía si me dejas.

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